Mientras seguimos evolucionando en torno a las presiones sociales, las expectativas y los cambios ambientales, también estamos trabajando en una era en que el diseño se está volviendo un aspecto muy importante en nuestro lugar de trabajo. No solo buscamos vernos bien, sino que también hay un deseo mayor por sentirnos bien. Normalmente, en el centro de todo eso, se encuentra la apreciación de las cosas que lucen un poco más que adorables.
Fascinación impulsada por los medios de comunicación
Una cosa en la que todos coincidimos es que los medios de comunicación alaban todo. El poder de las publicaciones pagadas en redes sociales y un espacio para que las personas se deleiten solo aumenta la necesidad individual que tenemos por encajar y superarnos entre nosotros. El diseño es ahora más accesible que nunca y a menudo nos enfrentamos en una batalla de comparación por la autoestima. Cuando escuchas a Steve hablar en su historia de Instagram sobre el maravilloso espacio de oficina que tiene y lo genial de las bebidas que toma los viernes, comienzas a preguntarte por qué eres el que se queda inundado de trabajo en una oficina aburrida que no te inspira nada y que te hace sentir ligeramente amargado.
Hay más en un buen diseño que en un buen aspecto
Cuando piensa en un espacio de oficina lujoso muchos se dejan llevar por la idea de que estos espacios innovadores son los que más gustan en Google y Facebook, pero ese no debería ser el caso. Normalmente estamos sobreinformados acerca de sus enormes presupuestos que incluyen lugares de recreo para adultos y máquinas de bebidas de lujo, pero la clave para un buen diseño es lograr que las cosas se vean bien y que al mismo tiempo atiendan incluso mejor las necesidades de las personas. Un buen diseño no solo debe permitir que tu personal tenga alternativas de estaciones de trabajo y un espacio para que puedan pensar, sino que también debe cumplir con el objetivo de cómo quieres que te perciban. Un buen diseño debe ser una extensión de los valores de tu empresa. Cada vez hay más empresas que están comenzando a notar cómo los pequeños cambios en la estética visual tienen un gran impacto en la satisfacción y la productividad.
Mantener el enfoque
El concepto del diseño en una oficina está bastante yuxtapuesto. Si bien un espacio de escritorio agradable en medio de un invernadero interior ofrece un buen escape para una tarde de ensueño, también funciona para alentar a tu equipo a querer trabajar. Un estudio realizado por la Universidad de Exeter descubrió que los trabajadores eran hasta 15 % más productivos con una oficina selva, en comparación con sus contrapartes inertes. Los empleos de oficina pueden sonar agotadores para tu mente, pero también para tus músculos. Los espacios incómodos tienen como resultado que tu equipo se sienta desconectado por la falta de ánimo. Adecuar tu oficina con las necesidades de tu personal puede cosechar beneficios, si tu espacio de oficina está optimizado para trabajar, optimizas automáticamente tu capacidad para el éxito. Las oficinas con diseño multipropósito son impulsadas gracias a la investigación. Conocer qué es lo que desea el personal debería impulsar tus decisiones de diseño. Si las personas se pierde en los detalles por el murmullo constante de las juntas por Skype, entonces tu espacio de oficina debe establecer un lugar apartado para llamadas o tal vez un área para tomarse 5 minutos para despejar la mente.
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